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ONTOLOGIA


La naturaleza de Dios
 
¿Qué o quién es Dios? ¿En que estamos pensando cuando usamos la palabra Dios? A menudo nos enfrascamos en discusiones a propósito de la naturaleza de Dios o lo divino y no encontramos la salida. Con el ingrediente adicional de que en esas discusiones solemos mezclar sentimientos, los compromisos personales y la imagen que queremos proyectar ante los demás. Pero dejando de lado la relación afectiva que tenemos con nuestras creencias, vale la pena hacer una aproximación racional al tema, de tal modo que nos ayude a despejar dudas conceptuales.
 
El concepto tradicional de Dios
En nuestro ámbito cultura, occidental y cristiano, Dios es usualmente concebido con un ser.  A ese ser se le atribuyen varias características:
·         Es el creador del universo.
·         Es absolutamente libre.
·         Es omnisciente, es decir, todo los sabe y lo conoce.
·         Es todo poderoso, o sea que posee un poder sin límite.
·         Es bondadoso, es decir, siempre hace el bien.
·         Es infinito y eterno.
En el cristianismo se piensa que solo existe un Dios. Esta creencia es compartida por otras religiones emparentadas con el cristianismo: el judaísmo y el islam, religiones que por eso se llaman monoteístas– expresión compuesta de raíces griegas que significa creer en un único Dios. Sin embargo, es obvio que esta no es la única manera posible de pensar en Dios. También es posible pensar que existen varios dioses, como ha ocurrido en muchas tradiciones alrededor del mundo, llamadas por ello politeístas.
El concepto de lo divino
 
Los que piensa que un dios  es un ser, sin importar en cuantos dioses crean, reciben el nombre de teístas. Pero existe un concepto más amplio: el concepto de lo divino. Ser teísta no es la única manera posible de entender lo divino. La palabra divino es un adjetivo, y aunque cotidianamente se la aplica a personas o cosas hermosas, su significado religioso y filosófico es distinto. Lo divino,  por ejemplo, es lo sagrado, o lo que no es humano y supera en dignidad a cualquier realidad existente o posible.
 
El concepto no-realista
 
Algunos creen que con la palabra “Dios” los seres humanos resumimos en un solo concepto todos nuestros más altos valores e ideales morales. Según ellos, Dios no es una realidad que existe independientemente del ser humano. El lenguaje religioso, es por tanto, la proyección de nuestras aspiraciones espirituales. Esta postura como no-realismo.
 
Sin embargo, aceptar el no-realismo es aceptar que Dios no es nada de lo que se supones que es Dios. Sería sólo una manera figurada de hablar de valores morales que perfectamente se pueden expresar y comunicar sin recurrir al lenguaje religioso. Lo que es característico del concepto de Dios y de lo divino se pierde. Por lo tanto, quienes asumen esta manera atenta de entender lo divino no están pensando en el mismo concepto en el que piensan aquellos para quienes es una idea.
 
El concepto del ateo
Los ateos son aquellos que no creen en la existencia de un Dios o dioses, pero en principio no transforman el sentido tradicional del concepto de Dios. Cuando piensan en Dios, también piensan en un ser prefecto y superior, sólo que no creen que ese tipo de ser exista. Por la misma razón, un ateísta puede creer que lo divino es real, así no crea que lo divino tenga una existencia real, que sea un ser que rige con su voluntad del universo.  
Los conceptos filosóficos
 
Antes de preguntarnos si Dios existe, debemos preguntarnos que es. Para ello es útil estudiar algunos conceptos posibles de lo divino.
 
·         Dios es trascendente
 
La mayoría de los filósofos teístas han concebido a Dios como un ser distinto del universo. Casi todos coinciden en que ese ser no puede ser pensado con las mismas propiedades con las que pensamos los seres que hacen parte del universo. Por lo tanto, cuando se dice que Dios existe, no se está diciendo que existe en el mismo sentido en que existe una cuchara. Dios es un ser trascendente. Esto significa que está en términos estrictos, más allá de la existencia y no existencia.
El filosofo medieval Santo Tomás de Aquino,  pensaba que cuando uno dice, por ejemplo, que Dios es “bueno”, “poderoso”, o “sabio”, no debe entender esos términos en el mismo sentido con el que se los aplica a un ser humano.
Por razones similares, algunos filósofos han llegado a pensar que no tiene sentido decir que Dios es un ser limitado, aplicable a seres finito. Dios es incomparable y quizás sobre él o ello sólo pueda decir lo que no es.
 
·         Dios es inmanente
 
Otros filósofos teístas han identificado a Dios con el universo mismo. Para estos filósofos, todo lo que existe es divino. Esta postura se denomina panteísmo.
El problema del panteísmo como tal, es que puede hacernos pensar que una cuchara es Dios. Dios se identificara con una multiplicidad de cosas finitas e imperfectas. Lo que no encaja muy bien con el concepto básico de lo divino: aquello que se supera cualquier realidad concreta.
Una versión más elaborada el es panteísmo: todo existe en Dios. El universo, como una entidad totalidad, un defensor de esta tesis es el filosofo Baruch Spinoza.

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